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Grufesa regresó a la Feria Internacional del Sector de las Frutas y Hortalizas, Fruit Attraction para dar a conocer un nuevo paso en su compromiso con un modelo productivo de agricultura circular a través
la inversión en la optimización de la cadena de frío industrial para seguir garantizando las mejores condiciones de refrigeración de su fruta de una forma más sostenible, contribuyendo al ahorro energético y de costes de producción.
La cooperativa moguereña ha invertido 480.000 euros en la instalación de un nuevo depósito separador de partículas, desmontaje y sustitución de las anteriores tuberías por unas nuevas de acero inoxidable más
eficientes, nuevos colectores compresores, estaciones y válvulas, y reforma del cableado eléctrico y de su programación informática, entre otros trabajos, que han pasado todos los controles y requisitos legales para
que la instalación, ya homologada, esté operativa y en pleno funcionamiento en esta campaña.
Por su carácter perecedero, los frutos rojos son productos sensibles a la temperatura y la gestión de la misma durante todo el proceso de almacenamiento y transporte es esencial para garantizar la máxima
calidad y frescura ya que el control de unas condiciones óptimas específicas permite que lleguen al consumidor conservando todas sus propiedades organolépticas, prolongando su durabilidad y contribuyendo a reducir el desperdicio alimentario.
El nuevo sistema de refrigeración se alimenta de la energía renovable generada por las placas solares fotovoltaicas instaladas en las cubiertas de Grufesa, con una capacidad de producción de más de 400.000 kWh,
y permitirá mantener esas condiciones de conservación óptimas de temperatura y humedad tanto en las líneas de manipulación, cámaras frigoríficas de almacenamiento, túneles de enfriamiento, muelles de carga y
recepción y antecámaras climatizadas, entre otras dependencias, pero con un considerable ahorro energético y de los costes de producción que contribuirán a mejorar su competitividad y rentabilidad.